La vida urbana en las ciudades, principalmente grandes metrópolis, han llevado a los seres humanos a la exposición a altos niveles de estrés generando problemas de salud mental, otros factores estresores como sobrepoblación, ambientes contaminados, altos niveles de ruido, aumento en las tasas de crimen, reducción del soporte social y ausencia de espacio de calma.

En aras de buscar formas de mejorar la salud mentad y calidad de vida, reconectar con el bosque y la naturaleza, ha aumentado su reconocimiento, estudios científicos y practicas relacionadas.

El concepto de baños de bosque desarrollado en Japón en los años 80, ha demostrado que el bosque presenta sustancias en el aire que colaborar en recuperar el balance fisiológico y psicológico.

El Servicio Forestal de Korea ha legitimizado el concepto de Terapia de Bosque, definido como actividades que fortalecen el sistema inmune y promueve la salud mediante el uso de varios elementos de la naturaleza como los aromas y los paisajes naturales, con un soporte empírico.

Varios estudios han demostrado que los ambientes boscosos promueven la salud mental y física de varias formas; disminución de la presión arterial, regulación de los niveles de glicemia, reducción de la actividad del sistema simpático y aumento de la actividad del sistema parasimpático (sistema encargado de la regeneración y descanso), reducción del dolor físico y psíquico, aumento en la actividad y cantidad de células Natural Killer (NK) relacionadas con el sistema inmune, calidad de vida. Por otro lado varios estudios han demostrado los beneficios en salud mental, reduciendo las emociones negativas, depresión, ansiedad, estrés y aumento las emociones positivas y autoestima. Estos algunos de los beneficios demostrados.

En conclusión pasar tiempo en la naturaleza, principalmente en bosques promueve la salud física y psicológica, ya sea de forma autónoma o guiada por personas entrenadas.

Bibliografía:

1. https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC5580555/pdf/ijerph-14-00851.pdf
2. https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC8296901/pdf/ijerph-18-06957.pdf